Los tiempos cambian, por eso la fe y la prudencia entran en acción. Junto a gente de la salud, líderes, pastores, directores de campamentos con años de experiencia y conocimiento les compartimos estas sugerencias en base a la experiencia para que las actividades como iglesia sean posibles. Muchas veces no se puede evitar lo inevitable, pero sí reducir el impacto.

Lo que presentamos a continuación es una síntesis en base a experiencias vividas. Sabemos que el fenómeno covid todavía se está estudiando y continuamente uno debe estar aprendiendo nuevos comportamientos, por eso socializamos este fragmento con la idea de brindarte un recurso para tu organización. Si bien surge desde la vivencia de los campamentos, sabemos que estos principios pueden llegar a aplicarse a eventos o retiros.

Nada de lo que compartimos es taxativo, sino que es lo que a nosotros nos funcionó o entendimos que haríamos diferente. Por eso, cada uno es libre de tomarlo, dejarlo o bien contribuir a diseñar mejor esta hoja de ruta acerca de cómo timonear el buque de los encuentros humanos en las olas de la pandemia en estos tiempos.

Proverbios 22.3 “el prudente ve el peligro y lo evita; el imprudente sigue adelante y sufre el daño”. 

Aceptar el desafío de servir en un campamento en contexto de pandemia puede ser una aventura de fe. Pero eso no significa dejar a un lado la prudencia; significa armarnos de valor, previsión y estar abiertos a capitalizar la nueva experiencia, sin perder el propósito de la misión del Evangelio de Jesús a la cual Él nos llamó.

“Más allá de las medidas preventivas que tomamos, creemos que llegar al final del campamento de jóvenes fue un milagro del Señor. Semanas antes convocamos a un grupo de padrinos de oración para estar orando, en ese antes y durante el campamento”, especifica Jorge Camandona, director de campamento de jóvenes, Cerro San Lorenzo, Córdoba, Argentina.

“Habrá un protocolo a seguir, pero eso no significa que no vayan a suceder cosas o que otras no puedan llegar a pasar. También hay cosas que al principio uno las plantea de una manera, pero después no son como uno las imaginó, y se te da vuelta todo. Pero lo principal del campamento no es lo que uno haga, sino lo que Dios vaya a hacer en la vida de los niños. Nosotros tuvimos que hacer un fin anticipado del campamento. Cada campamento enfrenta sus propias dificultades, luchas y en medio de eso Dios es el que asiste, provee y Dios es el que finalmente tiene que glorificarse en los niños, adolescentes y jóvenes”, dice Silvana de Acevedo, una de las directoras de campamento de niños, Cerro San Lorenzo, Córdoba, Argentina

Previo al campamento:

Las semanas que anteceden al campamento son claves en cuanto a identificar la etapa “baile” (apertura y relajamiento social) o “martillo” (momento duro o de incremento de casos positivos) de la pandemia, adiestramiento del personal, organización y previsiones. Estas son algunas recomendaciones:

Anticipar que la fecha del campamento tenga una distancia prudencial de las grandes festividades sociales, para facilitar el cuidado previo ya que estadísticamente estos eventos aumentan la posibilidad de contagio.

Solicitar a todo el personal y acampantes un aislamiento de 5 días previos, en lo posible. Alertar a todos los potenciales acampantes (y su familia) y todo el personal (y su familia) que asista. Pedirles que mantengan cuidados extremos (evitar juntadas y salidas). Así mismo, sería aconsejable que se le brinde a cada acampante un detalle por escrito de ciertos aspectos necesarios a tener en cuenta para su estadía en el campamento.

Hacer un seguimiento previo individual, constante e intenso, de los potenciales acampantes, motivando al cuidado propio y aislamiento.

Solo recibir en el campamento a aquellos que hayan hecho un hisopado con resultado negativo en las últimas 24hs y 48hs al inicio del campamento. Si uno está organizando un campamento de niños tiene una complejidad extra en este aspecto. Técnicamente se sabe que los testeos rápidos no son fidedignos. Solo un PCR puede diagnosticar con precisión.

Reclutar a más de una persona encargada para cada servicio o área, con la posibilidad de actuar en reemplazo o suplir una función; o bien, tener un equipo de suplentes polifuncionales. Esto posibilitará mantener las actividades y organización ante un caso sospechoso o explosión repentina de casos. En ciertas organizaciones convendrá que el personal suplente no esté en el campamento desde el comienzo, sino que sea un recurso humano interiorizado de las funciones que entrará en acción en caso de necesidad.

Asegurarse de que todo el personal tenga la misma información acerca de cómo se procederá en caso de evacuación parcial o total. Preferentemente organizar una reunión previa al campamento dedicada a conversar este tema, los procedimientos a realizar ante la aparición de casos o síntomas y el modo de toma de decisiones y flujo de información.

Considerar en la inscripción la posibilidad de una evacuación individual y total. De este modo, la familia visualizará esa posibilidad y, en acuerdo, se preverá el modo en que se va a llevar a cabo. Por ejemplo, puede haber un vehículo o serie de vehículos para tal fin o cada familia se compromete a asistir a su hijo.

Planificar el campamento en tres modos distintos:

El primero, la planificación esperada de días y horas normales.

El segundo, considerando una posible reducción de días. Recomendamos organizar la agenda del campamento para que el tema a tratar tenga su fuerte en los 3 primeros días, y allí desarrollar en plenitud los objetivos del mismo. Así, si surge algún caso positivo y se ve afectada la continuidad, se habrá concretado el propósito.

El tercero, considerando la posibilidad de verse forzados a suspender el campamento. Esto no lo desea nadie, pero hubo organizaciones de campamentos que llegaron a la conclusión de que en su caso era mejor no hacerlo. Esa decisión drástica, acompañada de una previsión, puede amortiguar el impacto e incluso encontrar un canal de salida y crecimiento exponencial.

En este tercer caso puede entrar en juego lo que se conoce como “Campamentos en casa”. La ventaja del campamento en casa es que crea su lógica para desarrollarse en el espacio donde uno convive con el grupo familiar.

Luego también existen propuestas muy bien resueltas como el campamento virtual, solo que tiene su enfoque más individual, y el campamento alterno, donde se hacen actividades y dinámicas durante el día en un espacio abierto, y de noche cada acampante va a dormir a su casa.

Ninguna de las propuestas es mejor que la otra, sino que son ideas para adaptar, adecuar y ver en cuáles el Señor guía a invertir. El sentido de este punto es salir del dualismo campamento “on” o “campamento “off”, y ver que se abre una gran cantidad de posibilidades.

Después del campamento

Independientemente de que vaya a llegar al final el campamento como se había pensado o no, el post campamento abre una nueva posibilidad.

Por un lado, porque los vínculos y la predisposición generalmente están frescos, pero además, porque en el caso de necesitar un aislamiento post campamento, esos días ofrecen el tiempo para ampliar la experiencia del campamento vivido.

Por eso consideramos importante delegar a una dupla la planificación del post campamento. Puede que sea la misma persona encargada de asistir de manera remota a los acampantes que no llegan a asistir o deban evacuar el campamento.

Se recomienda que los involucrados en coordinar el post campamento no sean las mismas personas que estarán sirviendo en el campamento en sí, ya que habitualmente después de una exigencia de ese calibre, el personal necesita un tiempo de reposo, aunque los acampantes sigan “con todas las pilas”.

En el apartado del “post campamento”, ofrecemos algunos tips:

Planificar el cierre del campamento. En la experiencia de una organización regular evangélica, los cierres de campamento se crean “en la marcha”, pero ¿si debemos hacer una finalización anticipada o forzada?, ¿qué vamos a hacer? Es importante tener en claro qué se espera del cierre para poder hacerlo de manera clara y concreta y éste también brinde su conexión para el post campamento.

Para acceder a recursos como campamento en casa:

#QuedateEnCampa especial VACACIONES 🏠 es una propuesta para toda la familia en tiempos de cuarentena.

👉🏼 Entra a http://bit.ly/QuedateEnCampa2  y conoce sobre el campa en casa con recursos gratuitos.

👉🏼 Accede a una serie de videos de temas especiales para padres en el rol de maestros https://bit.ly/PadresMaestros  

#QuedateEnCampa especial VACACIONES CON VALORES 🏠 es una propuesta para toda la familia en tiempos de cuarentena.

👉🏼 Entra a https://bit.ly/QuedateEnCampaVacaciones  y conoce sobre el campa en casa con recursos gratuitos.

El próximo artículo contará qué cosas tener en cuenta durante la actividad, estate atento al próximo sábado. Agradecemos a todos los que participaron de esta serie, fue en colaboración con Keila Florit, Jorge Camandona, Silvana de Acevedo, Miriam Bernetti, Karin Croce, Claudia Valiente, Bruno Milanesio, Elías Bustos, Ezequiel Oszurko y otros/as amigos/as también.

Casado con Rosana y son padres de tres niñas. Profesor nacional de Educación Fisica, egresado de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP). Autor y pastor/misionero de Grain of Wheat International y su iglesia local. Integrante del equipo de liderazgo del Global Children Forum y de la Alianza Cristiana de las Iglesias Evangélicas (Aciera)